Los astronautas de la NASA, Sunita “Suni” Williams y Barry “Butch” Wilmore, han regresado a la Tierra después de pasar más de nueve meses en la Estación Espacial Internacional (EEI), una estancia mucho más prolongada de lo inicialmente previsto debido a problemas técnicos con su nave de retorno.
La misión original de Williams y Wilmore, a bordo de la cápsula Starliner de Boeing, estaba programada para durar aproximadamente ocho días. Sin embargo, tras su llegada a la EEI en junio de 2024, se detectaron fallos en el sistema de propulsión de la nave, lo que impidió su retorno según lo planificado.
Durante su prolongada estancia, ambos astronautas desempeñaron roles cruciales en la estación, participando en tareas de mantenimiento, realización de experimentos científicos y efectuando caminatas espaciales para reparaciones esenciales. La experiencia y resiliencia de Williams y Wilmore fueron fundamentales para afrontar los desafíos de una misión extendida inesperadamente.
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El regreso a la Tierra se llevó a cabo a bordo de la cápsula Dragon “Freedom” de SpaceX. Junto a Williams y Wilmore, también retornaron el astronauta estadounidense Nick Hague y el cosmonauta ruso Aleksandr Gorbunov. La cápsula se desacopló de la EEI y amerizó con éxito en el océano Atlántico, cerca de la costa de Tallahassee, Florida, el martes por la tarde.
El retorno se llevó a cabo a bordo de la cápsula Dragon “Freedom” de SpaceX, que amerizó sin contratiempos en el océano Atlántico, cerca de la costa de Tallahassee, Florida. Junto a Wilmore y Williams, también regresaron el astronauta de la NASA Nick Hague y el cosmonauta ruso Aleksandr Gorbunov, quienes se unieron a la misión en una fase posterior.
Una misión marcada por desafíos técnicos
La misión de Wilmore y Williams comenzó en junio de 2024, cuando fueron lanzados a la EEI a bordo de la Starliner de Boeing. Este vuelo tenía como objetivo evaluar las capacidades de la nave, incluyendo sistemas de lanzamiento, acoplamiento y retorno. Sin embargo, durante el acoplamiento, la Starliner experimentó fallos en cinco de sus 28 propulsores, lo que comprometió su capacidad para regresar a la Tierra de manera segura.
Ante esta situación, la NASA decidió mantener a los astronautas en la EEI mientras se evaluaban las opciones de retorno. Inicialmente, se consideró la posibilidad de que regresaran en febrero de 2025 a bordo de una cápsula Dragon de SpaceX, pero esta opción se pospuso hasta marzo para garantizar la seguridad de la tripulación.
Adaptación a una estancia prolongada
Durante su estancia extendida en la EEI, Wilmore y Williams participaron en diversas actividades, incluyendo tareas de mantenimiento y experimentos científicos. Williams, en particular, completó su novena caminata espacial en enero de 2025, acumulando un total de 5 horas y 26 minutos en actividades extravehiculares. Esta experiencia la posiciona como una de las mujeres con más tiempo dedicado a caminatas espaciales.
La prolongada exposición a la microgravedad presenta desafíos físicos para los astronautas. Entre los efectos más notorios se incluyen el desgaste muscular, una menor carga de trabajo para el corazón y la acumulación de fluidos en la cabeza, lo que provoca una sensación constante de resfriado. Además, la piel se vuelve extremadamente sensible, describiendo la ropa como si fuera papel de lija.
El retorno a la Tierra
El regreso de la tripulación se llevó a cabo en varias etapas meticulosamente planificadas. La cápsula Dragon “Freedom” se desacopló de la EEI y realizó una maniobra de desorbitación que duró aproximadamente ocho minutos, colocándola en una trayectoria precisa hacia su punto de amerizaje. Durante el reingreso, la nave alcanzó temperaturas exteriores de hasta 1.900 °C debido a la fricción con la atmósfera terrestre, mientras que el interior se mantuvo a una temperatura confortable de aproximadamente 37,8 °C gracias al avanzado escudo térmico.
A medida que la cápsula descendía, desplegó sus paracaídas a unos 5.500 metros de altitud, reduciendo su velocidad de manera controlada hasta el amerizaje en el Atlántico. Equipos de recuperación especializados, a bordo de embarcaciones preparadas específicamente para esta tarea, aseguraron la nave y ayudaron a los astronautas a salir después de completar las verificaciones de seguridad necesarias.
@elpais En el interior de la cabina se encontraban los astronautas que han estado ‘atrapados’ nueve meses en el espacio #delfines #spacex #capsuladragon #espacio #nasa #animales #mar #oceanos
Un hito en la exploración espacial
El exitoso regreso de Wilmore y Williams destaca la resiliencia y adaptabilidad de los astronautas ante situaciones imprevistas. Además, pone de manifiesto la importancia de contar con múltiples proveedores de servicios de transporte espacial, como Boeing y SpaceX, para garantizar la seguridad y continuidad de las misiones tripuladas. Este incidente también resalta la necesidad de rigurosas pruebas y protocolos de seguridad en el desarrollo de nuevas tecnologías espaciales.
Mientras los astronautas se someten a evaluaciones médicas y se reintegran a la vida en la Tierra, la comunidad aeroespacial analiza las lecciones aprendidas de esta misión para mejorar futuras expediciones y asegurar que los desafíos técnicos puedan ser superados sin comprometer la seguridad de la tripulación.
