Arqueólogos descubren en Siria la escritura alfabética más antigua conocida

Un equipo internacional de arqueólogos ha desenterrado en Siria un hallazgo que podría marcar un punto de inflexión en lo que conocíamos hasta ahora como el inicio de la escritura alfabética: una tablilla de arcilla que contiene la escritura alfabética más antigua conocida hasta la fecha, datada en aproximadamente 1,800 a.C. Este descubrimiento, realizado en el yacimiento de Ebla, marca un hito en el estudio de las lenguas antiguas y la historia de la comunicación escrita.

La tablilla, que combina inscripciones alfabéticas y cuneiformes, se encuentra en un estado de conservación excepcional. Los expertos señalan que este sistema alfabético pudo haber sido un precursor de alfabetos posteriores, como el fenicio, considerado hasta ahora el más antiguo conocido.

“Este hallazgo reescribe lo que sabemos sobre los orígenes de los sistemas alfabéticos. La tablilla muestra que ya se buscaba simplificar la escritura compleja en formas más accesibles y universales”, explicó el doctor Hassan Al-Khatib, líder del proyecto arqueológico.

https://www.tiktok.com/@lifeinthepastlane_/video/7441325370025970976?q=alfabeto%20más%20antiguo%20conocido&t=1733518664995

El descubrimiento refuerza la importancia de Siria como un crisol cultural en la antigua Mesopotamia y el Levante. Además, plantea interrogantes sobre las conexiones culturales y comerciales entre las ciudades-estado de la región en esa época temprana.

La cerámica formaba parte de los artículos dentro de tumbas de la Edad de Bronce Temprano en Siria. El fragmento del alfabeto estaba junto a seis esqueletos, joyas de oro y plata, utensilios de cocina y vasijas de cerámica. Junto a estos contenidos estaban los cuatro cilindros con la escritura. Los arqueólogos a cargo de la investigación piensan que probablemente eran etiquetas para advertir el contenido de la tumba porque los cilindros estaban perforados.

“Me imagino una cuerda atándolos a otros objetos para que actúen como etiqueta. Sin un medio para traducir lo escrito, solo podemos especular”, explicó Glenn Schwartz, investigador de la Universidad Johns Hopkins.

Los investigadores continuarán estudiando la tablilla para descifrar su contenido, con la esperanza de arrojar nueva luz sobre el pensamiento y la organización de las primeras sociedades alfabéticas. Este hallazgo no solo amplía el conocimiento histórico, sino que también subraya la riqueza cultural de la región siria a pesar de las adversidades modernas.

¿Y cómo saben que es un alfabeto?

Existen registros de comunicación grabada en cerámica mucho más antiguos que las tablas de Siria. El sistema cuneiforme de Mesopotamia es uno de los ejemplos más evidentes al respecto. El origen de los símbolos puede rastrearse hasta el año 4000 a. C., al menos dos milenios antes que el descubrimiento en Siria. De acuerdo con los expertos en el tema, sistemas similares de escritura no pueden ser considerados alfabetos porque todavía usan logogramas: representaciones de conceptos o de palabras sin una pronunciación. Por ejemplo, múltiples culturas han elegido dibujar un círculo con rayos para ejemplificar el Sol. Este logograma aparece en sus sistemas de comunicación como pinturas o grabados, pero no puede tomarse como parte de una palabra más compleja.

Sin embargo, los alfabetos se distinguen por poseer un conjunto de símbolos o letras que representan sonidos básicos del lenguaje. Cada integrante de esta base se llama fonema, la unidad de sonido más básica de un lenguaje. Su combinación forma palabras con significado en función de su configuración. Para los arqueólogos de Siria, las tablillas tienen características propias de un alfabeto. Si nos detenemos unos segundos en la imagen, vemos que aparentemente no estamos ante dibujos o siluetas representativas, sino que parecen respetar unos códigos inherentes a la propia lengua, con un orden y norma en su escritura.

Reunión Anual de la Sociedad Estadounidense de Investigación en el Extranjero 

Glenn Schwartz, investigador de la Universidad Johns Hopkins, situada en Baltimore, Maryland (Estados Unidos), ha explicado: “Me imagino una cuerda atándolos a otros objetos para que actúen como etiqueta. Sin un medio para traducir lo escrito, sólo podemos especular”.

Según ha indicado Schwartz, el desarrollo de los alfabetos transformó la escritura al permitir que se extendiera a sectores de la población fuera de las clases privilegiadas. Este avance impactó profundamente en la manera en que las personas interactuaban, estructuraban su pensamiento y transmitían ideas. El reciente hallazgo sugiere que los intentos por crear métodos de escritura alfabética comenzaron mucho antes de lo estimado, y en una zona distinta a las tradicionalmente asociadas con estos sistemas.

Entradas relacionadas

Deja un comentario